El acuerdo de paz entre el PGA y el LIV sigue dando mucho que hablar en el mundo del golf, y hasta en la política. No solo por los cambios deportivos que podría generar en el golf, sino también por las investigaciones que se realizan en Estados Unidos: El Congreso y el Departamento de Justicia indagan posibles violaciones antimonopolio en dicha acción, por lo que algunos de los dirigentes más importantes del tour norteamericano han tenido que testificar en los tribunales. Además, de la la relación que puede haber con un régimen «totalitario y absolutista como es Arabia Saudi», según un congresista demócrata.
Ron Price, jefe de operaciones del circuito norteamericano y Jimmy Dunne, integrante de la junta directiva del tour, declararon ante el Senado de Estados Unidos por una posible vulneración a acuerdos económicos. A la luz han salido la oferta de un equipo para Tiger Woods, cheques millonarios (que rozarían los 1.000 millones de dólares) y el despido de Greg Norman: los detalles de las negociaciones entre el PGA y el LIV.
Sobre lo primero, los dirigentes dieron a entender que desde Arabia Saudita se ofrecieron a entregar equipos del LIV a Woods y Rory McIlory, intentando replicar una de las particularidades que tuvo el contrato con Niemann en el circuito saudí, en donde el chileno es dueño de un equipo. También se habló de la posibilidad de que se permitiera jugar fechas del LIV a ambos golfistas, pero por la información filtrada por el Congreso, esta propuesta nunca llegó a materializarse e incluso los jugadores no tenían información de nada de esto.
Otras de las declaraciones más intensas fue la relacionada con un posible despido de Greg Norman si finalmente se termina de concretar el pacto entre el tour norteamericano y el Fondo Público de Arabia Saudita. El “Tiburón Blanco” fue una de las primeras estrellas del golf en apostar por el LIV, tomando rápidamente el rol de CEO cuando la liga comenzó a dar sus primeros pasos, provocando una grieta entre el ex jugador y el PGA. Sin embargo, en el LIV de Valderrama, Norman se paseaba por las instalaciones recibiendo el apoyo de todos los jugadores y muy seguro de su continuidad en el LIV Golf.
En relación al dinero que recibirá la gira estadounidense por aceptar este acuerdo con el PIF, Ron Price dijo que la cantidad excede “los 1.000 millones de dólares”.
Todas estas informaciones salieron a la luz, luego de que ambos dirigentes testificaran ante la justicia norteamericana. El comité destinado para el caso, busca determinar cómo es que la inversión del Fondo Público Saudí en el golf se alinea con los intereses geopolíticos del reinado de Medio Oriente. En su primera intervención, Richard Blumenthal, senador demócrata, fue claro con el objetivo que tenían. “Poner al descubierto las razones uw hay detrás de este acuerdo con un brutal y represivo régimen en una querida institución del deporte estadounidense con es e PGA Tour. Esto debido a que sus líderes, antes del acuerdo, habían dado un argumento moral al oponerse a que sus jugadores recibieran el dinero saudí”, comentó.